!Hey Kari!
Mirándome en este frío espejo me pregunto hoy, a las
2y36pm del día;
-¿Soy negro?,¿Soy blanco?, ¿De qué color se supone que
sea?; ¡Ahí viene Kari! (Interrumpiendo mis preguntas), con sus ojos hinchados
como siempre, me quiere abrazar a la altura de sus brazos, ¡Que pereza!
-Me gusta el piso, ¡¿Acaso no entiendes?!, -le digo mirándole los pies-; de nuevo
he logrado que no me abrazara.
Me dirijo al balcón, a tres centímetros de Kari, la veo
fumarse un cigarro lleno de esperanzas turbias y solitarias, -¿Será que está
triste?, se la ha pasado balbuceando ríos eternos de lagrimas dulces, lo sé,
porque las he probado, una tras otra.
¿Qué hace?, ha tirado el cigarrillo junto a mi brazo,
¿acaso no ve que estoy aquí?. ¡¿Por qué se sube sobre el barandal del balcón?!
-Oyeeeee Kari, ¿Estás bien?, ven, ¿qué haces?, eso está
muy alto.. Un centímetro más cerca de ella, dos centímetros, un centímetro..
¡HEY KARI!, asombrada gira su cabeza, sin pestañar ni una vez, se baja
lentamente y recoge su cigarrillo untado de arena y esperanzas, me coge mi par de cachetes y me dice en medio de
sus dientes amarillos, “si supiera que es volar, ¿Qué harías?”, fácil, (le
respondo);
- volaría. Yo sí estoy hecho de papel.-
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